La región vinícola de Bolzano está situada en la cuenca de un valle soleado a una altitud de 250 a 900 metros.
Los viticultores producen principalmente vino tinto en los suelos de grava y aluviales: Lagrein fuerte y Vernatsch especiado. Pero también hay vinos blancos delicados.

Rodeado de viñedos, a las afueras de la ciudad, se encuentra el castillo de Maretsch, de casi mil años de antigüedad.
Antaño sede de la familia Römer, asociada al Príncipe del Tirol, es hoy un centro de conferencias y eventos.

A mediados de marzo se celebra allí la Cata del Vino de Bolzano: Un encuentro de unos 40 viticultores de todo el Tirol del Sur, que llevan unos 200 vinos para degustar y familiarizarse con ellos.
El evento está coorganizado por Slow Food, que organiza seminarios sobre el vino, el queso y el pan.

Además de los actos culinarios, se organizan excursiones guiadas a los viñedos y algunos viticultores abren sus bodegas a los visitantes.
Por la noche, en torno a las 21.00 horas, un colorido programa musical ameniza la velada.