Cuenta la leyenda que la salsa fría de hierbas era el plato favorito del príncipe de los poetas Johann Wolfgang von Goethe, que su madre Aja tenía que cocinarle una y otra vez: El plato se menciona por primera vez en la ciudad bancaria hacia 1850, cuando el consejero privado ya había fallecido.
Sin embargo, esto no resta popularidad a los paquetes de hierbas, que pueden comprarse en todo Fráncfort desde el Jueves Santo hasta otoño.

Lavadas y finamente picadas, las siete hierbas se mezclan tradicionalmente con nata agria y se sirven con huevos duros y patatas fritas. Sin embargo, el Festival de la Salsa Verde, que se celebra desde 2008, es más creativo: 49 restauradores de Fráncfort y alrededores presentan sus mejores ideas de recetas: siete salsas diferentes en siete veladas, que se degustan y juzgan en la carpa del Roßmarkt.

Los ganadores de cada jornada competirán entre sí el octavo día, y el público votará por la mejor salsa verde del año.
La semana está presentada por el anfitrión e iniciador del evento, Anton Le Goff, y Hilde, de Bornheim.
Cada noche, los dos héroes locales reciben a músicos, cómicos y otros artistas de cabaret de Hesse, que dan al evento un marco digno, no siempre del todo serio.

Un día antes del festival propiamente dicho, el Mercado de la Salsa Verde abre sus puertas entre Roßmarkt y Hauptwache. Aquí, los visitantes pueden degustar la clásica salsa verde con patatas y huevos, schnitzel o filete , o probar sabores exóticos con influencias árabes o caribeñas. Dos escenarios al aire libre con música regional e internacional amenizan la velada.