En la provincia de Jaén crecen unos 63 millones de olivos, diez veces más que el número de habitantes de la región.
De sus frutos se extraen unos 750.000 litros de aceite al año: Una cuarta parte de la producción mundial. Los andaluces hace tiempo que se dieron cuenta de que la cantidad no lo es todo.

Oro Bailén, Soler Romero o Castillo de Canena: muchos de los aceites producidos en la región ganan regularmente premios en ferias y son considerados los mejores aceites de oliva del mundo.
Los barones del aceite de Jaén demuestran de lo que son capaces en la fiesta del aceite de oliva de la región, que cada año se celebra en un lugar diferente.

En el espectáculo se pueden degustar varios aceites de oliva, como el Picual, de sabor amargo y herbáceo, o el Arbequina, más suave y afrutado.
Durante el evento también se presentan productos derivados del olivo, desde mermeladas y perlas de aceituna hasta jabones y cremas  -. Y los bares y restaurantes de los alrededores ofrecen tapas de aceitunas a precios asequibles.

La localidad que acoge el evento  también organiza diversas actividades: Senderismo por alguno de los parques nacionales de la provincia, por ejemplo, visita a una almazara o a un museo del aceite.