Cuando Giancarlo Zigante encontró en 1999 una trufa de 1,3 kilos en los bosques de Motovun, al noroeste de la península de Istria, fue el pistoletazo de salida de una carrera sin precedentes.
Hoy, este croata es el rey sin corona de la trufa de Istria y el señor de todo un imperio de delicatessen.

Desde mediados de mayo hasta finales de octubre, el empresario invita a los visitantes a las Jornadas de la Trufa de Livade durante siete fines de semana, y cientos de visitantes de todo el mundo responden a su llamada.
El rico programa  incluye una feria de la trufa, así como una feria internacional del vino y otros productos locales.

Los visitantes pueden degustar prosciutto, queso, miel y aceite de oliva de Istria. O dejar que los mejores chefs les enseñen los secretos de la cocina con trufas.
Un tren lleva a los visitantes al bosque, donde un cazador de trufas autorizado les enseña a recoger el preciado tubérculo del suelo del bosque con la ayuda de perros adiestrados.

Pero no sólo en Livade se celebra este sabroso hongo. En la vecina Oprtalj también se celebran a finales de octubre las Jornadas de la Trufa, con degustaciones de vino y la elección de las trufas más bellas de la temporada.
El Festival del Terán y la Trufa tiene lugar en Motovun, mientras que Momjan celebra las Jornadas del Moscatel y la Trufa a principios de noviembre.