Se dice que los habitantes de Radovljica, a menos de seis kilómetros de Bled, tienen predilección por los dulces. En la histórica panadería de la posada Lectar se elabora pan de jengibre desde 1766. Según una antigua receta y pintado a mano. No tan antiguo es el festival del chocolate, que se celebra en el centro del bonito pueblo desde 2013. Se considera el mayor de este tipo en Eslovenia.

Durante el festival, los visitantes pueden saborear productos de chocolate y obras maestras de fabricantes de chocolate eslovenos y extranjeros: pralinés y trufas, pasteles y bollería de chocolate, fruta recubierta de chocolate, licores y vino de chocolate. Un amplio programa de festivales -desde un circo infantil hasta talleres de cocina, debates y conciertos- ofrece entretenimiento.

También están abiertos el museo del pan de jengibre y el taller de pan de jengibre. Joze Andrejas y su hija Mojca mostrarán cómo se elabora tradicionalmente el famoso pan de jengibre de Radovljica. También merece la pena visitar el museo apícola del castillo, que introduce a los visitantes en el mundo de las abejas: Sin miel, no hay pan de especias.