Konstanz cuenta con una tradición vinícola centenaria. Fundada en 1225, la Spitalkellerei de la ciudad a orillas del lago de Constanza es la más antigua de Alemania y aún hoy posee unas 23 hectáreas de viñedos, incluido el famoso paraje de Meersburger Haltnau.

Las principales variedades cultivadas son Müller Thurgau, Pinot Noir, Traminer y Regent, típicas de la región del lago de Constanza.
Sus vinos -así como los de otros 20 viticultores de la región del lago de Constanza- pueden degustarse en la fiesta del vino de la ciudad, a finales de julio.

También habrá especialidades culinarias de la región de Vierländereck: sabrosas Dünnele del horno de leña o contundentes Kässpätzle, por ejemplo.
La fiesta del vino se completa con actuaciones musicales y un programa infantil con sesiones fotográficas, pintacaras y tiro al arco.